Si hace unos meses os contábamos en nuestro blog que el anteproyecto de la nueva ley hipotecaria prohibía vincular la concesión de hipotecas a los seguros de hogar o de vida, en nuestro post de hoy queremos recoger la última denuncia pública del Tribunal Supremo en la que resalta esta nueva forma de abuso bancario relacionado con los seguros. Este nuevo abuso está relacionado con los seguros de vida que obligaron a contratar para la concesión de la hipoteca.
El problema en cuestión se da cuando se produce el fallecimiento. Tras haberse exigido la contratación del seguro de vida como condición para aprobar la hipoteca, se da el caso de que al fallecer la persona que contrató el seguro, la entidad bancaria se desentiende del seguro, activa la ejecución de la hipoteca para reclamar el inmueble y no espera a que los herederos cobren el seguro.
Es una práctica que se repite en las Audiencias Provinciales de toda España, desde las cuales los magistrados han trasmitido su preocupación por la dificultad de dar una solución favorable a los usuarios. El problema reside fundamentalmente en que la ley no recoge el cobro de estos seguros como un motivo para frenar y posponer una ejecución hipotecaria, y mientras no se modifique la ley es muy difícil cambiarlo.
Existe una segunda práctica abusiva a la que al Tribunal Supremo le ha sido mucho más sencillo terminar con ella. Se trata de casos en los que se ha contratado el llamado seguro de amortización, que garantiza al banco el cobro de los pagos pendientes en caso de fallecimiento o invalidez del hipotecado. En estos casos el beneficiario es la entidad bancaria, y los familiares al ir a reclamar al seguro se encuentran con que es la entidad la que debe reclamarlo. Lo que sucedía en estos casos es que la entidad no realizaba la reclamación pero en cambio si continuaba exigiendo a los herederos las cuotas de la hipoteca.
Confía siempre en expertos del sector seguro…
…a la hora de contratar tus seguros y no permitas que tu entidad bancaria vincule la concesión de tus préstamos al contrato de tu seguro.
